Se conocen aquellas actitudes negativas que se oponen a lo que establecen los valores éticos y los valores morales que regulan y guían las conductas de las personas en la sociedad.
Los antivalores de estos ejemplos son el odio, la inmoralidad y la discriminación. Los antivalores atentan contra las creencias importantes sobre las que se funda la vida en sociedad, por ejemplo, contra el respeto, la tolerancia, la honestidad, la responsabilidad, la lealtad, la solidaridad y la armonía.