Hoy sembré un arbolito. Todos los días le llevaré agua para que beba y no se muera de sed. Con mis manos quitaré la maleza para que crezca hasta el cielo. Cuando esté grande, los pájaros harán sus nidos en sus ramas y lo alegrarán con su canto. Yo descansaré a su sombra y recordaré los días en que pequeño y débil era todavía. Los árboles son útiles, yo los quiero y cuido con amor. 0.00 a on