Para la producción de alfarería artesanal, desde la antigüedad se
utiliza el barro cocido a fuego (a altas temperaturas, el barro se
vuelve mas manejable y plástico) o la arcilla (silicatos de aluminio
hidratados), que a su vez posee caolín, cal, hierro, etc.
La arcilla con la que se elaboran los ladrillos es un material
sedimentario de partículas muy pequeñas de silicatos hidratados de
alúmina, además de otros minerales como el caolín, la montmorillonita y
la illita. Se considera el adobe como el precursor del ladrillo, puesto
que se basa en el concepto de utilización de barro arcilloso para la
ejecución de muros, aunque el adobe no experimenta los cambios
físico-químicos de la cocción. El ladrillo es la versión irreversible
del adobe, producto de la cocción a altas temperaturas.
El adobe es más rudimentario, y está conformado por arcilla y arena, mezcladas con **** y secada al sol.